Para conquistar el desafío de eliminar los virus en el juego, los jugadores deben usar estratégicamente cápsulas coordinadas en color. El campo de juego está lleno de virus de tres colores distintos: rojo, amarillo y azul. Como jugador, controla las cápsulas que caen, ajustando su posición moviéndolas hacia la izquierda o hacia la derecha y girándolas para alinearse con los virus y las cápsulas existentes. El éxito se produce cuando se las arregla para conectar cuatro o más segmentos de cápsulas o virus del mismo color, ya sea horizontal o verticalmente, lo que lleva a su eliminación del tablero. El objetivo final es eliminar cada nivel erradicando todos los virus presentes. Sin embargo, si las cápsulas se acumulan hasta el punto de bloquear el cuello estrecho de la botella, se acabó el juego.
Los jugadores tienen la flexibilidad de elegir su dificultad inicial al comenzar un nuevo juego. Esta elección, que va de cero a veinte, dicta el número de virus que deben eliminarse. Además, hay tres configuraciones de velocidad que controlan la velocidad de descenso de las cápsulas dentro de la botella. La puntuación en el juego está exclusivamente vinculada a la eliminación de virus; Ni el tiempo para completar el nivel ni el número de cápsulas utilizadas afecta la puntuación. Después de conquistar la mayor dificultad, los jugadores pueden continuar jugando y aumentando sus puntajes, aunque el número de virus para despejar permanece constante. Se otorgan puntos de bonificación para eliminar múltiples virus simultáneamente, pero no se otorgan puntos adicionales por desencadenar reacciones en cadena, donde la eliminación de un grupo de objetos conduce a la eliminación de otro. La configuración de velocidad del juego también influye en la puntuación, con velocidades más altas que resultan en más puntos otorgados.